ODIOSIDAD "CRISTIANA"



Me hace mucho ruido cuando alguien me dice que "soy valiente" por decir lo que digo. Con todo el cariño del mundo, no se trata de valentía, se trata de derecho. Algo que nadie debería temer es poder expresar libremente su pensamiento, mientras se haga con respeto y en un contexto de suponer que otros tienen el mismo derecho.

La mayoría de las iglesias y las denominaciones cristianas, casi sin excepción, practican de manera sistemática la cultura de la cancelación. Es decir, cuando alguien expresa algo distinto a lo que sostiene la mayoría (relativa) o lo que el "establishment" religioso expresa, entonces, lo anulan, lo persiguen, lo silencian, lo amenazan, lo excluyen, etc. es decir LO CANCELAN. Si una persona creyente expresa su opinión, eso es absolutamente válido, independiente de que te guste o no la opinión de dicha persona. En mi sitio de Facebook, y hago énfasis MI página, no acepto a quienes: - Difunden rumores sin base (no soy cómplice). - Expresan fake news o son parte de la política de la conspiranoia (aceptarlo sería aprobarlo tácitamente). - Atacan personas y no ideas (aprobar dicha actitud es validar un delito). - No están dispuestos al diálogo (no estoy dispuesto a diálogo de sordos). - Usan argumentos que no son propios, sino solo repitiendo citas descontextualizadas (de la Biblia) o de EGW (en el caso de adventistas). Argumentos, no es otra cosa la que pido. - No entran a dialogar o aprender, sino solo a atacar, ser odiosos, haters, etc. (otra faceta de la cultura de la cancelación) - Amenazan, no argumentan (amenazar es un delito). Todos los demás, en otro contexto, tienen derecho, igual que yo a expresar sus opiniones. Pero, la libertad de opinión no da derecho a mentir, transmitir rumores impropios, amenazar, cancelar a otros, participar en conspiranoia, pretender que no puedo ser criticado por opinar, creer que la posición (la que sea) me da privilegios, etc. Nadie debería ser valiente por expresar una opinión. En un estado democrático, en una iglesia que cree en la libertad, en una humanidad que acepta la diversidad, nunca debería considerar que opinar es un acto de valentía... al contrario, creo que es una cobardía no tomar partido, ser neutral y no opinar, dichas personas, siempre me han parecido peligrosas, porque en general opinan solo si les favorece. Dr. Miguel Ángel Núñez
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