El día del pastor
Ayer se celebró el día del pastor... y, me hice la promesa a mí mismo de no volver a participar en algo así. Realmente me hace sentir mal. Cuando el culto no es adoración o está centrado en el ser humano, pierde todo sentido. Siento que toda autocelebración en el fondo es negar el ministerio. Debería ser el día de las misiones o de la vocación misionera y deberíamos hablar de aquellos que han rendido su vida a Dios estableciendo las prioridades correctas, y en ese plano entran muchos, no sólo pastores, sino médicos, profesores, colportores, y miles que día a día dan su vida por adelantar el mensaje evangélico. Los pastores no debemos ser el centro de la Misión. Cuando eso ocurre, entonces, el ministerio pierde sentido. Tal vez ese sea el problema por el cual no avanzamos más. Cuando el ministerio se hace autoreferente y se pierde de vista al único Pastor, a Jesucristo, entonces, institucionalizamos el ministerio, y ese es un modo de asesinar la Misión. Me prometí a mí mismo